Pasado el contundente triunfo de la Presidenta
Cristina Fernández en las elecciones del 23 de octubre, una sucesión de
medidas, hechos y anuncios fueron marcando una agenda de transición
entre la verificación del apoyo popular marcado en las primarias y
confirmado en las elecciones generales y la nueva asunción de un período
gubernamental en el cual se determinará como mantiene el rumbo.
La impronta de una crisis económica (ya no
sólo financiera) internacional de magnitud, que ha venido sustituyendo
por dimisiones o elecciones perdidas a distintos gobiernos de Europa.
Lejos de encontrar su solución en el corto plazo, marca una agenda inter
nacional de la cual es difícil mantenerse al margen en una economía
global tan interconectada.
La ilusión de un blindaje, se desmorona y
hace más que necesario recurrir a distintas medidas para preservar la
economía nacional, como las provinciales.
El gobierno en ese sentido inicio su
recorrido, con el decreto que obliga a liquidar las exportaciones, para
petroleras, mineras en el país. Algo que si bien no es significativo en
su volumen, puesto que las mineras siguen pagando irrisorias retenciones
a cambio de declaraciones juradas, es un gesto, si se quiere para la
tribuna popular que lo celebra con justeza.
Luego vinieron los anuncios de la quita de subsidios vinculados a la energía primero para empresas, como las del Juego, telefonía móvil y otras. Luego para grandes empresas y usuarios residenciales de Puerto Madero, Barrio Parque y los countries de todo el país. Hasta ahí algo difícilmente cuestionable. En realidad lo más cuestionable es entender el motivo por el cual se subsidió en los últimos 8 años de gobierno kirchnerista a estos sectores.
Luego vinieron los anuncios de la quita de subsidios vinculados a la energía primero para empresas, como las del Juego, telefonía móvil y otras. Luego para grandes empresas y usuarios residenciales de Puerto Madero, Barrio Parque y los countries de todo el país. Hasta ahí algo difícilmente cuestionable. En realidad lo más cuestionable es entender el motivo por el cual se subsidió en los últimos 8 años de gobierno kirchnerista a estos sectores.
Luego viene la quita de subsidios para el
resto de usuarios residenciales por fuera de quienes perciban la
asignación por hijo o la jubilación mínima. Estamos hablando de un gran
sector medio que por defecto sino contesta pidiendo mantener el subsidio
se lo retiraran en bloque. Esto conjuntamente con la prédica por los
medios oficialistas instalando la idea que es necesario renunciar a los
subsidios, logra un enganche con el discurso neoliberal de baja de del
gasto público y achique forzosos de subsidios para sectores populares y
medios. Mientras se conservan otro tipo de medidas beneficiosas para los
sectores de mayores ingresos de nuestra sociedad. Por ejemplo se
mantienen sin gravar la renta financiera y la compra y venta de
acciones. No se restituyen los aportes patronales que eliminó Cavallo.
No se avanza en una reforma impositiva. En fin se mantienen firme el
andamiaje neoliberal sin conmoverse.
Esta disminución de subsidios sólo afecta a
menos del 7% del total. Para el 2012 están presupuestados $75.273,3
millones teniendo como los rubros más abultados a la electricidad
$41735,1 millones, Transporte $19.024,5 millones y empresas públicas
estatales $10.261,7 millones.
No es casual que cuando hicieron los anuncios el ministro Julio De
Vido remarcó como uno de los fundamentos “dar una señal a los mercados” y
quien primero salió a apoyar fue Jaime Campos, presidente de AEA
(Asociación Empresaria Argentina) señalando: “Las medidas dispuestas por
el Gobierno representan una decisión muy significativa en la dirección
correcta”(…)“El avance hacia el reconocimiento del valor real de la
energía es un cambio cultural necesario para la sustentabilidad
energética de la Argentina en el mediano y largo plazo, superando de
este modo el acostumbramiento a pagar precios por debajo de su verdadero
costo para la sociedad”.
Por su parte el Gobierno renueva sus
pruebas de amor con la UIA(Unión Industrial Argentina) su titular José
de Mendiguren , dice que comparte el rumbo del gobierno, Cristiano
Ratazzi de FIAT baja línea afirmando que "habrá que ajustarse los
cinturones" y pensar que habrá "algún gasto que no se podrá hacer" y
otros empresarios reclaman mejoras en las exportaciones y modificación
en la ley de accidentes de trabajo. Habrá que ver cómo le responde el
gobierno nacional a uno de sus principales aliados.
Un modelo de grandes ganancias
Un modelo de grandes ganancias
Recientemente un informe del instituto de
formación vinculados a los sectores de Hugo Yasky mencionan con
preocupación el Grado de concentración y Extranjerización de la
economía: “La transición entre la convertibilidad y la
posconvertibilidad supuso un salto en materia de concentración
económica. La cúpula empresaria ha logrado consolidar su importancia en
la economía nacional, tal como lo refleja su peso en la producción del
país y el sostenimiento de muy elevadas tasas de rentabilidad. En el
período 1991-2001, en promedio, el peso de las ventas de la cúpula
empresaria fue equivalente al 20,4% del Valor Bruto de Producción (VBP)
de la economía nacional; en 2003-2009 alcanzó al 28,0%. En gran medida,
este salto en el nivel de concentración se vincula con una dispar
evolución de los precios de la economía versus los de estas grandes
empresas. Se mantiene, a su vez, un elevado grado de extranjerización de
esta cúpula empresaria, que fue resultado principalmente de las
tendencias desplegadas a lo largo de la convertibilidad. Así, en 2009 el
55,4% de las ventas totales de las 200 empresas de mayor tamaño del
país está explicado por las ventas de las empresas extranjeras.”
(Informe de Coyuntura Nº 8 Noviembre 2011- CIFRA – CTA)
Esto se corresponde con las grandes
ganancias que obtuvieron las 10 empresas que más ganaron en los primeros
9 meses de este año, obteniendo ganancias casi por $14.000 millones
dejando en claro que lejos está este modelo de ser el que garantice una
justa distribución de la riqueza.
Mientras la presidenta llama a no boicotear el modelo, el mismo se reparte extraordinarias ganancias para unos pocos sectores mientras vastos sectores de nuestra población carecen de servicios cloacales, agua potable, vivienda digna, un sistema integrado de salud, educación pública de calidad. Todos derechos que se expresan en nuestra Constitución pero que mientras no haya voluntad de cumplirlos con políticas activas y que cambien el curso de nuestra Patria, se constituyen en letra muerta sólo para la declamación abstracta que no se corresponde con la gente de carne y hueso que día a día necesita sortear obstáculos y que es mucho más que cifras y estadísticas que se pretenden esconder al mismo tiempo que se manipula al INDEC.
Santiago Martínez
Twitter: @clorfus
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