En el marco del debate planteado en la centro izquierda sobre sus posibles alianzas, debate que comenzamos con la posición del diputado Abrebaya, le sumamos ahora la posición de Libres del Sur, integrante del FAP, quien firmó un acuerdo programático con un sector del CC-ARI
COMPROMISO DE LA COALICION CIVICA-ARI Y LIBRES DEL SUR
“Promover la unidad de las fuerzas progresistas en todo el país”
El presidente de la Coalición Cívica en el orden nacional, Pablo Javkin, y el del Movimiento Libres del Sur, Humberto Tumini, se reunieron hoy en la Ciudad de Buenos Aires, acompañados de los diputados nacionales Alfonso Prat -Gay y Victoria Donda para presentar un acuerdo político en dirección a las elecciones legislativas de octubre próximo.
Este acuerdo contemplará que sus partidos trabajen conjuntamente en todos los distritos del país, promoviendo una gran unidad opositora de las fuerzas populares, progresistas y democráticas.
Los dirigentes concluyeron que el objetivo del gobierno nacional es obtener en las próximas elecciones legislativas un número suficiente de senadores y diputados que les permita ir por una reforma constitucional que, a su vez, les avale buscar la re-reelección indefinida de la actual Presidenta, hoy impedida legalmente.
Es decir, que el oficialismo se propone intentar que perdure un modelo político, económico y social agresivo, soberbio, plagado de corrupción y de indignante doble discurso; generador de un país con enormes inequidades sociales, pobreza e inseguridad, donde las leyes son letra muerta, las instituciones y el federalismo una caricatura.
Frente a dicha intencionalidad kirchnerista, coincidieron tanto en rechazar la maniobra reeleccionista, como al propio modelo en curso al que se oponen frontalmente. Acordando que el gran desafío es derrotar la estrategia gobierno nacional ,como a las distintas variantes que propone la derecha para reemplazarlo.
La salida a este régimen en retirada debe ser en un sentido de progreso: ni Cristina Kirchner, ni volver al pasado.
Los cuatro dirigentes se comprometieron a buscar caminos de diálogo y a trabajar en pos de:
Un país amigable. Una vasta mayoría de la sociedad está cansada del país en blanco y negro que persigue el kirchnerismo y algunos sectores de la oposición. Basta de agresividad y confrontación. Propiciemos el diálogo entre los distintos, en todos los estamentos de la sociedad, enfocándonos en las muchas coincidencias que tenemos. Y abordemos en conjunto, como cuestión de Estado, la inseguridad que afecta crecientemente la calidad de vida de los argentinos.
Un país sin pobreza. Las políticas públicas siempre tienen que estar orientadas a los más necesitados. Nunca Argentina cobró tantos impuestos; nunca fue más injusto que 25% de compatriotas no lleguen dignamente a fin de mes. La pobreza ya no es un problema económico. Hay que dejar de lado el asistencialismo esclavizante y pasar a políticas sociales verdaderamente universales que derroten definitivamente la pobreza.
Un país en desarrollo. Debemos pasar del crecimiento espasmódico y desequilibrado a un verdadero proceso de desarrollo económico y social sustentable que consiga la igualdad social, geográfica y generacional y que cuide el medio ambiente.
Un país federal. Basta de centralismo fiscal y de gobernadores que tienen que arrodillarse en la Casa Rosada para que le devuelvan migajas de lo que es suyo. Los recursos del interior deben permanecer en el interior. Aspiramos a un desarrollo de los pueblos y ciudades del interior, que los jóvenes no tengan que emigrar de sus pueblos para desarrollarse, que la rentabilidad de un productor no dependa de la distancia a Buenos Aires, que las rutas y las vías que hoy no tenemos nos integren cada vez más.|
Un país respetuoso de la ley, las instituciones y la Constitución. Cumplir las reglas y respetar las minorías nos hace confiables. Creemos en serio en la República y en la Democracia; en la independencia de los poderes y en la sana alternancia en el poder. Aspiramos a un fortalecimiento de los partidos políticos que cimienten nuestro sistema representativo de gobierno.
Un país que prioriza la educación. No hay inclusión social definitiva sin una educación pública de primera calidad que llegue a todos los confines de nuestra nación. Tristemente, hoy en Argentina hay un millón de jóvenes que ni estudian ni trabajan. Abogamos por las mejores escuelas públicas en los barrios más humildes, por una permanente capacitación de los maestros y por una universidad pública de excelencia.
Honestidad en el ejercicio de la función pública. La corrupción es siempre un cáncer, moralmente más condenable cuando involucra los fondos de todos. Si los funcionarios no roban y no dejan robar, se acaba la corrupción.
Transparencia en los actos de gobierno y rendición de cuentas. A la cultura enquistada el “funcionario público” queremos reemplazarla con la del “servidor público”. El empleado público, especialmente el de naturaleza política, debe estar verdaderamente al servicio de los demás. La política debe dejar de representar la salvación para algunos mediocres corruptos y transformarse en una actividad honesta y transparente al servicio del bien de todos.
De este modo, Donda, Prat-Gay, Tumini y Javkin hicieron “un llamado a materializar una gran unidad de las fuerzas populares, progresistas y democráticas en todo el país.”
COALICION CIVICA–ARI - MOVIMIENTO LIBRES DEL SUR
COMPROMISO DE LA COALICION CIVICA-ARI Y LIBRES DEL SUR
“Promover la unidad de las fuerzas progresistas en todo el país”
El presidente de la Coalición Cívica en el orden nacional, Pablo Javkin, y el del Movimiento Libres del Sur, Humberto Tumini, se reunieron hoy en la Ciudad de Buenos Aires, acompañados de los diputados nacionales Alfonso Prat -Gay y Victoria Donda para presentar un acuerdo político en dirección a las elecciones legislativas de octubre próximo.
Este acuerdo contemplará que sus partidos trabajen conjuntamente en todos los distritos del país, promoviendo una gran unidad opositora de las fuerzas populares, progresistas y democráticas.
Los dirigentes concluyeron que el objetivo del gobierno nacional es obtener en las próximas elecciones legislativas un número suficiente de senadores y diputados que les permita ir por una reforma constitucional que, a su vez, les avale buscar la re-reelección indefinida de la actual Presidenta, hoy impedida legalmente.
Es decir, que el oficialismo se propone intentar que perdure un modelo político, económico y social agresivo, soberbio, plagado de corrupción y de indignante doble discurso; generador de un país con enormes inequidades sociales, pobreza e inseguridad, donde las leyes son letra muerta, las instituciones y el federalismo una caricatura.
Frente a dicha intencionalidad kirchnerista, coincidieron tanto en rechazar la maniobra reeleccionista, como al propio modelo en curso al que se oponen frontalmente. Acordando que el gran desafío es derrotar la estrategia gobierno nacional ,como a las distintas variantes que propone la derecha para reemplazarlo.
La salida a este régimen en retirada debe ser en un sentido de progreso: ni Cristina Kirchner, ni volver al pasado.
Los cuatro dirigentes se comprometieron a buscar caminos de diálogo y a trabajar en pos de:
Un país amigable. Una vasta mayoría de la sociedad está cansada del país en blanco y negro que persigue el kirchnerismo y algunos sectores de la oposición. Basta de agresividad y confrontación. Propiciemos el diálogo entre los distintos, en todos los estamentos de la sociedad, enfocándonos en las muchas coincidencias que tenemos. Y abordemos en conjunto, como cuestión de Estado, la inseguridad que afecta crecientemente la calidad de vida de los argentinos.
Un país sin pobreza. Las políticas públicas siempre tienen que estar orientadas a los más necesitados. Nunca Argentina cobró tantos impuestos; nunca fue más injusto que 25% de compatriotas no lleguen dignamente a fin de mes. La pobreza ya no es un problema económico. Hay que dejar de lado el asistencialismo esclavizante y pasar a políticas sociales verdaderamente universales que derroten definitivamente la pobreza.
Un país en desarrollo. Debemos pasar del crecimiento espasmódico y desequilibrado a un verdadero proceso de desarrollo económico y social sustentable que consiga la igualdad social, geográfica y generacional y que cuide el medio ambiente.
Un país federal. Basta de centralismo fiscal y de gobernadores que tienen que arrodillarse en la Casa Rosada para que le devuelvan migajas de lo que es suyo. Los recursos del interior deben permanecer en el interior. Aspiramos a un desarrollo de los pueblos y ciudades del interior, que los jóvenes no tengan que emigrar de sus pueblos para desarrollarse, que la rentabilidad de un productor no dependa de la distancia a Buenos Aires, que las rutas y las vías que hoy no tenemos nos integren cada vez más.|
Un país respetuoso de la ley, las instituciones y la Constitución. Cumplir las reglas y respetar las minorías nos hace confiables. Creemos en serio en la República y en la Democracia; en la independencia de los poderes y en la sana alternancia en el poder. Aspiramos a un fortalecimiento de los partidos políticos que cimienten nuestro sistema representativo de gobierno.
Un país que prioriza la educación. No hay inclusión social definitiva sin una educación pública de primera calidad que llegue a todos los confines de nuestra nación. Tristemente, hoy en Argentina hay un millón de jóvenes que ni estudian ni trabajan. Abogamos por las mejores escuelas públicas en los barrios más humildes, por una permanente capacitación de los maestros y por una universidad pública de excelencia.
Honestidad en el ejercicio de la función pública. La corrupción es siempre un cáncer, moralmente más condenable cuando involucra los fondos de todos. Si los funcionarios no roban y no dejan robar, se acaba la corrupción.
Transparencia en los actos de gobierno y rendición de cuentas. A la cultura enquistada el “funcionario público” queremos reemplazarla con la del “servidor público”. El empleado público, especialmente el de naturaleza política, debe estar verdaderamente al servicio de los demás. La política debe dejar de representar la salvación para algunos mediocres corruptos y transformarse en una actividad honesta y transparente al servicio del bien de todos.
De este modo, Donda, Prat-Gay, Tumini y Javkin hicieron “un llamado a materializar una gran unidad de las fuerzas populares, progresistas y democráticas en todo el país.”
COALICION CIVICA–ARI - MOVIMIENTO LIBRES DEL SUR
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