LA ECONOMÍA SOCIAL NECESITA UNA IDENTIDAD

Escrito por Enrique Mario Martinez en Construcción colectivaLa economía de mercado es hegemónica aquí y en el mundo entero. Tiene reglas de funcionamiento muy simples, casi obvias, junto con efectos también previsibles.
 En el intercambio hay ganadores y perdedores permanentes, con la mochila sobre los Estados de cubrir las necesidades de los derrotados.La gran paradoja del mundo moderno es que todos sabemos que la economía de mercado expulsa a los más débiles, pero todos los gobiernos actúan como aquel muchacho del tango, que se secaba en una timba y se armaba para volverse a meter. No se ha podido ni construir, ni siquiera pensar, una alternativa superadora.En esa comedia dramática, se ha incluido a la “economía social”. Sin definiciones precisas, sería el subconjunto integrado por aquellas unidades que tienen un componente interno de mayor generosidad que una empresa capitalista tradicional. La primera idea incluyó a las cooperativas ya existentes, por vocación de algún grupo. Luego se sumó a quienes realizan actividades bien periféricas y con niveles de ingreso por debajo de la subsistencia, como los cartoneros o los empleados temporarios en obras públicas, a los cuales por inercia, se los estimula a que constituyan cooperativas.

A todos, a los que se reúnen por iniciativa propia y a quienes lo hacen por necesidad y hasta por desesperación, las políticas públicas los incorporan en términos más asistenciales que productivos. Hay un implícito: se trata de unidades con más posibilidades de perder que de ganar, porque no tienen el fuego sagrado de los que hegemonizan la economía de mercado. Por un lado, las valorizamos en el discurso. Por otro lado, su acceso al crédito es cercano a cero; las grandes empresas no las prefieren como proveedoras; hasta los sindicatos no ven con buenos ojos empresas sin delegados ni comisión interna.Sin embargo, en el trabajo de los desplazados o marginados por la economía de mercado está una de las posibilidades de construir escenarios alternativos, en que no tengamos necesidad de sumarnos a la farsa de festejar el crecimiento del producto, a la vez que aumentamos los subsidios a los excluidos.

La economía social debe pasar a ser considerada un valor positivo. Debe comprender a las unidades productivas cuyo horizonte es producir bienes o servicios para satisfacer necesidades de la comunidad, siendo retribuidas por ello para asegurar una vida digna a sus integrantes.Es decir: primero el sentido social del trabajo. Luego su retribución justa.Para que ese concepto se instale y se disemine, es necesario contar con modelos prácticos, que se puedan exhibir, discutir, hasta sostener como ventajosos en términos relativos con la economía de mercado organizada detrás del lucro.
La manera concreta a la mano es estudiar a fondo las condiciones 
estructurales para hacer sustentables los proyectos que hoy son considerados de modo asistencial, induciendo los cambios de contexto que viabilicen su éxito.Esas condiciones pasan por dos ejes conceptuales:

a) Asumir la asociatividad, no solo al interior del grupo, sino entre grupos similares, como condición necesaria inexorable.b) Buscar con tesón la eliminación de las etapas de intermediación parásita que aparecen siempre que un eslabón de una cadena de valor es débil.El derecho absoluto a la presencia de grupos de productores hortícolas en los mercados concentradores; la posibilidad de integración vertical de los recuperadores urbanos que procesen cartón o plástico; la eliminación de toda traba administrativa para inscribir productos alimenticios; el encuentro de productores de alimentos o de indumentaria con consumidores; la conversión de las cooperativas de Argentina trabaja en contratistas formales del Estado; son algunos de caminos que deben salir de la mirada de asistencia, para ser derechos a defender, como sostenedores de un nuevo sistema de valores en construcción.

O cambiamos o seguimos en la dramática farsa de festejar el aumento del producto bruto, que es acompañado de aumentos en los subsidios a los excluidos.Enrique M. Martínez
Share on Google Plus

About Soy de Villa Sarmiento

This is a short description in the author block about the author. You edit it by entering text in the "Biographical Info" field in the user admin panel.
    Blogger Comment
    Facebook Comment

0 comentarios :

Publicar un comentario