Entrevista exclusiva con Adolfo Pérez Esquivel: “Es peligroso acotar los derechos humanos del ´76 al ´83”

Nicolás Spalek para diario NCO
nspalek@hotmail.com

Entrevista exclusiva con Adolfo Pérez Esquivel: “Es peligroso acotar los derechos humanos del ´76 al ´83”

El imaginario popular asocia con justa razón indefectiblemente a Adolfo Pérez Esquivel a la lucha de los derechos humanos. NCO pudo charlar en exclusiva con el Premio Nóbel por la paz, que considera que la juventud a tenido un nuevo despertar y criticó con dureza la actual política de derechos humanos del gobierno nacional.

-Uno de los fenómenos sociales de los últimos años ha sido la participación de una nueva generación en la militancia política. ¿Cómo compara esta juventud de hoy con respecto de las de los 70?
-Son situaciones distintas, en esa época los jóvenes tal vez tenían otros tipos de preocupaciones e ideales. Cuando se hablaba de la liberación continental había toda una corriente social y política. Esta juventud esta despertando, y participando desde otra perspectiva para fortalecer las instancias democráticas, como fortalecer la participación social en la vida del pueblo. Es importante que hoy se estén acercando muchísimos jóvenes a través de programas como Jóvenes por la memoria pero también desde otras instancias como las universidades. Es gente que no vivió esa época –en referencia a la última dictadura militar- pero que necesita hacer memoria. Es como ese antiguo proverbio que dice `si no sabes adonde vas, regresa para saber de adonde vienes´. Están haciendo memoria para saber cual es su identidad, sus valores en la vida. Esto es muy valioso
-¿A que atribuye este nuevo despertar?

-Creo que tiene que ver con otra toma de conciencia crítica. Los jóvenes hoy también tienen desafíos enormes, que no son los mismo de los 70. Muchos que salen de la universidad tienen una perspectiva bastante insegura para conseguir empleo. Están tratando de ver que caminos tomar. También hay muchas esperanzas en los jóvenes.
-Desde la Comisión provincial por la memoria están siguiente muy de cerca el conflicto generado en Famatina y Andalgalá.
 ¿Qué balance hace de la situación?
-Estamos en permanente contacto con ellos. Acabo de llegar de la Universidad de Río Caurto en Córdoba, donde tratamos el problema de la mega minería. Eso también hace a los derechos humanos. Hay un peligro muy grande, que es acotar los derechos humanos del ´76 al ´83, y nos olvidamos de los DDHH hoy y lo que pasó antes del ´76; y porqué pasó. Casos como los de Julio Lopez, Luciano Arruga, la represión en Andalgalá Famatina, la ley antiterrorista. Es importante que se analicen estas contradicciones del gobierno.
-¿Cómo ve la escalada que viene teniendo el conflicto por Malvinas?
-El caso Malvinas va a pasar a un segundo plano después del 14 de junio. Que se cumplan 30 años es una fecha emblemática. Creo que hay que seguir trabajando para que tanto Gran Bretaña como la Argentina se sienten a negociar. Nosotros estamos haciendo una campaña internacional junto a otros premios Nóbeles, como Rigoberto Mencochum, para que esto siga pasando. A fines de abril voy a viajar a Gran Bretaña por el caso.
-¿Cómo ve a América Latina en un contexto macro dentro de la lucha por los derechos humanos?
-Con dificultades. Pero también con esperanza. AL hoy tiene muchas posibilidades de integración regional, entre Venezuela, Brasil, Ecuador, Uruguay, Argentina, Paraguay hay un bloque regional. El UNASUR es muy importante, como el MERCOSUR que habrá que fortalecer y abrir el espacio con otros países del continente. Por el otro lado hay amenazas, intentos de golpes de estado, de condicionamiento de la democracia. Eso hay que apoyarlo en gobiernos que tienen una idea conceptual y política en defensa de la vida y la democracia.
-¿Y a Argentina en particular?
-Lo que pasa es que el gobierno de Nestor Kirchner y Cristina Fernandez centraron los derechos humanos en la época de la dictadura. Eso es un error gravísimo. Las violaciones de derechos humanos la tenemos a la vista, en el país se violan los derechos humanos. Andalgalá, pueblos originarios en Salta y Tucuman, la democracia no se hace para un sector social, significa derechos e igualdad para todos. Lamentablemente aquí todavía estamos distantes de lograrlo, pero no hay que desesperar y seguir trabajando en esa dirección.
-¿Como se siente con la vuelta a la docencia?
Nunca dejé a la docencia, siempre he seguido enseñando en todos los niveles. Actualmente en la UBA, dentro de la Facultad de Ciencias Sociales.
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