HISTORIA MÍNIMA Y LAS CONTRADICCIONES DE UN GOBIERNO POPULAR

Cuando comenzó la gestión del INTI que acompaño el gobierno de Néstor Kirchner y el primer período de Cristina Kirchner, se identificaron una larga lista de problemas laborales, algunos de los cuales venían de arrastre de mucho tiempo y se fueron encarando en trabajo conjunto con los dos gremios reconocidos (UPCN y ATE).
Escrito por Enrique Mario Martinez
Uno de los problemas, repetido en gran parte del Estado, es que el servicio de limpieza, a cargo de unas 40 personas, lo realizaba una contratista que explotaba vilmente a su personal.
Se decidió anular la contratación de ese sistema y en cambio se puso el mayor empeño en que el personal de esa empresa formara una cooperativa y se hizo la contratación directa, lo cual sin mayor gasto para el INTI, representó mejoras de salarios de más del 50% para el personal. Un gremio (ATE) se comprometió a acompañar el fortalecimiento de la cooperativa y seguramente puso empeño. Sin embargo, a medida que pasaron los años quedó claro que los trabajadores de la cooperativa no podían superar la cultura en la que habían vivido tanto tiempo y un pequeño grupo pasó a explotar al resto.
La situación se hizo insostenible, hasta que a fines de 2010, después de muchas deliberaciones se decidió incorporar al personal en relación de dependencia con el INTI y conducirlos en forma distinta.
Apareció, sin embargo, otro problema. Lo describo.
Durante el gobierno de Néstor Kirchner se formalizaron los primeros convenios colectivos en el sector público. El INTI firmó el suyo.

Entre tantos elementos que se tuvieron en cuenta para pautar las normas de ingreso, de evaluación y de ascenso de los trabajadores, se incorporó la obligación de contar con título secundario para acceder a la institución.
Del personal de limpieza incorporado solo un puñado tenía título secundario. El resto solo primaria. A iniciativa de la Presidencia del INTI se firmó un acta que era un compromiso de honor por el cual los incorporados se obligaban a terminar el secundario, brindando la Institución la posibilidad de hacerlo a través de un Bachillerato Popular, dictado en el lugar, cediendo 2 horas laborables por día para estudiar y poniendo los trabajadores otras 2 horas adicionales. La iniciativa no solo buscaba cumplir con el convenio colectivo sino aprovechar el impulso para dar a esos trabajadores un respaldo adicional para el caso en que decidieran cambiar de ocupación.

Entiendo que entre 2011 y 2012 se recibieron 18 empleados del INTI y hay 15 a los que les falta para cumplir el plan de 3 años que prevé la educación de adultos. Se podría llenar un libro con los testimonios de orgullo de algunas personas que reconocieron la oportunidad y que exhibían sus calificaciones en cada oportunidad posible.
Ahora, en 2013, las autoridades del INTI comunican que el programa se eliminará porque “el INTI no es un colegio”. El gremio que venía apoyando el plan la hizo fácil: negoció que aquella acta compromiso de honor no necesite cumplirse.
La vida va. Las historias mínimas no son relevantes. Total, en la villa de León Suarez donde vive la mayoría de los afectados, muy poca gente tiene secundario.
Share on Google Plus

About Soy de Villa Sarmiento

This is a short description in the author block about the author. You edit it by entering text in the "Biographical Info" field in the user admin panel.
    Blogger Comment
    Facebook Comment

0 comentarios :

Publicar un comentario